
En un comunicado, el Ministerio de Salud de Gaza denunció que la ocupación israelí ha cometido trece masacres contra familias, dejando a varias víctimas atrapadas bajo escombros, mientras la llegada de ambulancias y equipos de defensa civil se ve obstaculizada.
Desde el inicio de la ofensiva de Israel contra Hamas, el número de palestinos fallecidos asciende a 28,985, mayoritariamente adolescentes, mujeres y niños. Además, 68,883 personas resultaron heridas desde el 7 de octubre.
En las últimas 24 horas, nuevos ataques israelíes se cobraron la vida de al menos 127 palestinos y dejaron 205 heridos adicionales, según Europa Press.
La situación se agrava con la interrupción del funcionamiento del Hospital Nasser, el segundo más grande de la Franja de Gaza. A pesar de tener 200 pacientes que necesitan atención urgente, el hospital enfrenta problemas graves, incluyendo la falta de electricidad y generadores detenidos, resultando en la muerte de seis pacientes por falta de oxígeno.
Las autoridades palestinas y la Organización Mundial de la Salud (OMS) alertan sobre la crisis humanitaria, advirtiendo que bebés recién nacidos corren el riesgo de morir en las próximas horas.
Este devastador conflicto se desató tras el ataque de milicianos de Hamas en el sur de Israel el 7 de octubre, que llevó a una escalada de violencia por parte de Israel, dejando ciudades de la Franja de Gaza en ruinas y forzando al 85% de los gazatíes a huir de sus hogares hacia instalaciones de la ONU, muchas de las cuales también fueron bombardeadas por el Ejército de Israel.