En un contexto de ajuste y reducción del gasto público, el Gobierno nacional ha anunciado el cierre de las delegaciones provinciales del Ente Nacional de Comunicaciones (Enacom), lo que se traducirá en la eliminación de alrededor de 500 empleos.

La medida, que entrará en vigor el próximo 1 de abril, forma parte de un plan más amplio de reestructuración del Estado impulsado por la administración del presidente Javier Milei.

Según lo dispuesto en la resolución oficial, se establecerá un período de transición para garantizar la continuidad de ciertas tareas y la realización de un inventario patrimonial.

Además, el Gobierno prepara un decreto para limitar la intervención estatal en los precios de servicios de telecomunicaciones, como Internet, cable y celulares, lo que evidencia un cambio en la política regulatoria del sector.

Esta decisión ha generado críticas y preocupación en diversos sectores, especialmente entre los trabajadores afectados y las organizaciones sindicales, que denuncian un nuevo golpe al empleo público y la precarización laboral.