El calendario escolar marca el inicio de clases en CABA para el 26 de febrero y en Buenos Aires el 1 de marzo, pero la falta de fondos y negociaciones salariales preocupa a los maestros. La decisión del gobierno de Javier Milei de retener los fondos destinados a los salarios docentes ha generado tensiones, llevando a los vicegobernadores a expresar su inquietud.

La situación se agrava por la ausencia de negociaciones en medio de una alta inflación. La titular de CTERA, Sonia Alesso, advierte que, sin paritarias y fondos del incentivo salarial, el inicio de clases es “imposible”. La incertidumbre afecta especialmente al interior del país, donde las provincias enfrentan dificultades financieras.

Este miércoles, los gremios docentes realizarán una reunión nacional para decidir los pasos a seguir. Alesso destaca que todas las provincias están en apuros, y la falta de fondos enviados por Nación se suma a los problemas derivados de la inflación.

La situación es especialmente delicada en San Luis, donde el gobierno provincial aún no ha pagado el Fondo al Incentivo Docente (FONID) y Conectividad a los educadores del sector privado. Juan Accornero, del Sadop, señala que la pérdida del poder adquisitivo y la falta de transferencias gubernamentales afectan la estabilidad laboral de los docentes.

La preocupación se extiende a los colegios privados, donde la disminución de matrículas y la falta de subsidios podrían resultar en despidos. Accornero destaca la necesidad de diálogo y soluciones antes del 22 de febrero, fecha clave para el retorno de los docentes. La incertidumbre persiste, y el sector espera respuestas sobre los fondos no transferidos y las negociaciones salariales, temiendo un inicio de clases en condiciones precarias.