Un bebé de apenas dos meses fue brutalmente asesinado a golpes en La Plata. La Justicia sospecha que el crimen fue cometido por los padres. La víctima tenía una fractura en el cráneo, otra en la costilla y múltiples moretones en todo el cuerpo, lesiones que, según los médicos, eran “de vieja data”.
El caso salió a la luz el domingo por la tarde, cuando Lucas Javier Mardone (30) llevó a su hijo Mateo al Hospital Gutiérrez de La Plata en estado crítico y dijo que se había asfixiado tomando la mamadera.
El bebé fue internado en la sala de terapia intensiva, en donde lo estabilizaron y le tomaron radiografías. Por la gravedad del caso, tuvo que ser derivado al Hospital de Niños de La Plata. Pese a los esfuerzos del personal de salud, murió a las pocas horas de ingresado.
Los médicos constataron que la muerte había sido provocada a golpes. Tenía una fractura en el cráneo, una fractura en la costilla y numerosos moretones distribuidos por todo el cuerpo que indicaban que el bebé había sido maltratado desde su nacimiento.
Por protocolo, cuando un menor ingresa al hospital con golpes, tiene que ser informado a la Policía. Por eso, los médicos llamaron al 911. Sin embargo, cuando llegaron los efectivos, el papá del bebé ya se había ido. El fiscal del caso, Juan Menucci (UFIyJ N° 6), ordenó la inmediata detención del hombre, que fue avalada por el Juzgado de Garantías N°3.
Los oficiales de la Bonaerense montaron un operativo en la casa del acusado, en 517 y 122, en la localidad de Tolosa, donde no solo arrestaron a Mardone, sino también al abuelo de la víctima, de 56 años, y al tío, de 21 años, que quedaron en libertad a las pocas horas.
En tanto, la madre del bebé, al tener 17 años, fue identificada pero no detenida, y quedó bajo la intervención de la UFI de menores. Se abrió una causa por “averiguaciones de causales de muerte”.
Tras indagar a los acusados, el fiscal adelantó que cambiará la carátula a “homicidio calificado por el vínculo” y aseguró: “En principio, los autores del hecho serían los progenitores”.