El Gobierno Nacional y las universidades públicas alcanzaron un acuerdo significativo al confirmar un aumento del 270% en el presupuesto destinado a los “gastos de funcionamiento”. Este incremento, inicialmente aplicado solo a la Universidad de Buenos Aires (UBA), fue extendido a todas las universidades públicas del país tras la jornada de protesta del 23 de abril.

La reunión clave tuvo lugar este lunes con el Consejo Interuniversitario Nacional (CIN), donde se decidió no solo la ampliación del incremento, sino también la implementación de un ajuste por inflación para el futuro. Este movimiento ha sido bien recibido por las instituciones educativas, aunque quedan varios temas pendientes por resolver, como las obras suspendidas y las becas estudiantiles.

El acuerdo incluye un cronograma de pagos que se extenderá hasta fin de año. Sin embargo, las universidades y el Gobierno continuarán las conversaciones en mesas de trabajo programadas para abordar diversos aspectos críticos. Entre los puntos destacados están las resoluciones impagas de 2023, la asignación de fondos para programas específicos en 2024, y la reanudación de las obras universitarias suspendidas.