El vicegobernador, Ricardo Endeiza, ha transmitido un mensaje tranquilizador a Juventud, asegurando que participarán en el Torneo Federal A. Sin embargo, la urgencia del calendario, especialmente para San Luis FC, que se enfrenta a Boca en la Copa Federal a fin de mes, genera incertidumbre sobre si la decisión llegará a tiempo para permitir el entrenamiento y la preparación adecuada.
Mientras Juventud recibe apoyo público, surge la pregunta en la dirigencia de Estudiantes sobre si contarán con el mismo respaldo. La vinculación de Endeiza y gran parte del gabinete con Juventud genera preocupaciones sobre la equidad en el apoyo a los equipos. Por otro lado, las jugadoras de San Luis FC, conocidas como las “Pibas”, enfrentan una situación más apremiante, con la necesidad de saber si podrán jugar, considerando la persecución que han experimentado por parte del gobierno.
Las jugadoras, temerosas de represalias, expresan su tristeza y desilusión por la intervención que ha detenido sus entrenamientos y les ha impedido disfrutar de un momento único en el fútbol nacional. La incertidumbre y el miedo se apoderan del equipo, que ha demostrado un rendimiento excepcional en los últimos años.
Los clubes de la provincia esperan con ansias que Claudio Poggi revierta la intervención para permitir que los equipos salten a la cancha y continúen con su participación en la AFA. Mientras tanto, Juventud, Estudiantes, los juveniles de AFA y los árbitros enfrentan un presente lleno de incertidumbre, a la espera de noticias positivas que restauren la normalidad en el fútbol de San Luis.
Nota relacionada:
Bazla Vs. Ramírez: Entre acusaciones y desmentidas continúa la batalla legal